En la mañana del jueves, los integrantes de las comisiones de Economía primero, y los de Legislación después, mantuvieron sendas reuniones para continuar con el análisis de los temas que se encuentran en las mismas. En Legislación, recibieron la visita del cura Bellini por la donación de un terreno camino al Puerto para la construcción de una capilla.
La primera de las reuniones que se llevaron a cabo en la mañana del jueves, la mantuvieron los concejales Pablo Monzón, Miguel Molina y Valerio Ramírez de la Comisión de Economía y Finanzas, quienes abordaron los siguientes temas:
Expediente Nº 1.859: Nota del Consejo Vecinal Barrio Manuel Pando sobre aumento de Tasa, al que le dieron Despacho Archivando por haberse aprobado el aumento.
Expediente Nº 1.858: Nota de la Fundación Ayudar sobre Eximición de Impuestos Municipales, a la que también le dieron Despacho Archivando por haberse aprobado la de eximición de impuestos.
COMISIÓN DE LEGISLACIÓN
Luego los ediles Geraldine Calvi, Alejandro Medina, Carlos Rajoy y Ariel Pereira, todos ellos de la Comisión de Legislación, resolvieron enviar una nota a la Secretaría de Planeamiento y a la Dirección de Industria y Comercio de la Municipalidad, para consultarles sobre la habilitación del local bailable en la Avenida Perón, si se presentaron los planos y permisos de obra, etc, e invitaron a Nicolás Kryzanowski, el vecino que se encadenó a una columna del Edificio Municipal para protestar por la apertura del mismo, a una reunión el próximo día jueves en el horario de esa comisión para analizar la situación y escuchar sus reclamos.
Recibieron los ediles también al Padre Bellini, quien fue acompañado de la concejal Norma Zorzoli, quien les planteó la necesidad de que se agilicen los trámites de un terreno solicitado en donación por el Obispado en 2006 en el camino al Puerto Exterior y junto a la Escuela, para la construcción allí de una capilla.
El terreno fue comprado a Ramiro Millán por el Municipio en la zona de Puerto Boca, pero no fue escriturado debido que este falleció antes de que se hiciera, por lo que deberán gestionar ante la sucesión y de esta manera poderlo escriturar directamente al Obispado.
Se reunirán con los herederos y con la Secretaría de Planeamiento se determinará el sitio exacto para delimitarlo y evitar asentamientos.