Este martes en el Salón de Sesiones del HCD, un importante número de empleados de la empresa Casinos del Litoral fueron recibido por concejales de distintos bloques, a quienes les plantearon su preocupación al tomar conocimiento de un proyecto de ordenanza que plantea restringir el horario permitido de funcionamiento del Casino en la ciudad, ya que consideran que podrían verse afectados por la misma. Los ediles les transmitieron la tranquilidad de que se  escucharán a todas las partes involucradas y de que se buscará el bien general.

Estuvieron presentes los concejales Pablo Muniagurria, Federico Tournier, Jesús Méndez Vernengo, Laura Manassero, María Elena Poggi, Valeria Calvi, Mario Quiróz, Darío Zapata, Mónica Cortinovis y Lucía López.

Los empleados del Casino expresaron que llevan siete meses sin que la empresa desarrolle su actividad normal, y que son 100 las familias que viven en forma directa de la misma, las que se vieron con sus ingresos reducidos por esta situación.

Además, dejaron en claro que la totalidad de los empleados de la firma están en blanco, cobrando siempre en tiempo y forma sus haberes, y que una gran parte de ellos ya tienen una antigüedad laboral de más de 20 años, y ven con preocupación la propuesta de reducción horaria de funcionamiento, que actualmente es al público de 09,00 a 05,00, ya que significaría para ellos la eliminación de muchos puestos de trabajo, y remarcaron que Goya no puede darse el lujo tras el cierre de Massalín Particulares, de perder otra importante fuente laboral.

Ante el planteo de que podrían funcionar la confitería, el comedor, los cines y el hotel, expresaron que en realidad la empresa los toma como un total, y que es el casino en sí el que asume los costos del funcionamiento de los otros rubros mencionados, que en forma independiente no son rentables, pero que al ofrecerse como un servicio adicional tienen su razón de ser.

Les mostraron los ediles las cientos de firmas que les fueron enviadas, tanto de particulares como de entidades intermedias, clubes, consejos vecinales, etc, solicitando esa medida en estudio, por lo que como representantes del pueblo debían tomarlas en cuenta y legislar por el bien general por sobre el particular.


Tras expresar su preocupación ante este proyecto de ordenanza, los concejales les transmitieron la tranquilidad de serán escuchados las veces que sean necesarias, para que puedan aportar datos e información, antes de que tomen una resolución, ya que el proyecto recién está en la etapa de análisis y estudio.